Un tipo de temblor postural que no es causado por un trastorno subyacente y se considera normal. Normalmente se manifiesta como un temblor fino bilateral al mantener una posición contra la gravedad. Los temblores fisiológicos pueden empeorar como resultado de la estimulación simpática; las causas incluyen estrés, ejercicio, fatiga, cafeína, alcohol, hipoglucemia, y ciertos medicamentos (por ejemplo, ISRS, agonistas beta-2) y condiciones médicas (hipertiroidismo, feocromocitoma).