La ecografía es un estudio de partes blandas, en el cual se utiliza un equipo especializado que posee un transductor. Ese cabezal a su vez se encarga de producir ondas con el fin de penetrar en los tejidos más profundos y poder detectar alteraciones tisulares. Este estudio se puede realizar en diversas zonas del cuerpo, siendo las más comunes el abdomen, la zona pélvica y los senos.